Los cinco países que en 2008 ejecutaron a más personas fueron:
China, al menos 1718
Irán, al menos 346
Arabia Saudí, al menos 102
Estados Unidos 37
Pakistán, al menos 36
Formas de Ejecución
Existen diferentes formas de ejecutar la pena de muerte, según la tradición y cultura de cada lugar. En Estados Unidos se utiliza la silla eléctrica o la inyección letal. En los paises islámicos habitualmente se utliza la Lapidación que es el castigo que impone la Sharia o Ley Islámica.

Ejecución de menores de edad
Algunos paises ejecutan a personas que eran menores de edad cuando cometieron el delito del que se les acusa.

A pesar de que esta práctica esta prohibida por el derecho internacional, cinco paises han ejecutado a menores en los últimos seis años: China, Yemen, Sudán, Pakistán, Arabia Saudí e Irán.

Irán es el país en el que se ejecuta a mas menores, al menos 137 están actualmente condenados a muerte en Irán, se sabe que en 2007 ejecutaron a ocho y otros ocho en 2008, en 2009 ya llevan como mínimo tres ejecutados.

Enemistad con Dios y Corruptos en la Tierra
En Irán existe una amplia gama de delitos penados con la muerte, entre ellos “Moharebeh ba Khoda” (enemistad con Dios) y “Mofsed fil arz” (ser corrupto en la tierra), estos son los cargos que se les imputa a las personas acusadas de alzarse contra el Estado, cometer atracos o espiar. Se consideran delitos contra Dios y no se puede solicitar indulto.
Transplante de órganos de personas ejecutadas
El viceministro de salud de China, Huang Jiefu, en artículo publicado en el China Daily el 26 de agosto del 2009, reconoció que dos de cada tres orgános transplantados, vienen de presos que han sido ejecutados.

El problema de esta cuestión es que, esta extracción de organos se hace a personas que no han rellenado ningún tipo de documento en el que se declaren como donantes, lo cual hace pensar en la existencia de un mercado negro de venta de órganos que representa un incentivo para que se realicen ejecuciones.

Amnistía Internacional, en su informe sobre la pena de muerte de del 2009, comenta:
Se corre también el riesgo de que las personas condenadas a muerte se conviertan en una fuente reconocida de órganos que dificulte la adopción y aplicación de medidas para abolir la pena de muerte. Además, el momento de la ejecución podría estar determinado por la intención de utilizar los órganos de ese condenado en concreto.

La práctica transforma las ejecuciones en operaciones médicas, que implican la participación de personal médico en actos contrarios a la ética profesional